“Es lo que tiene que pasar, estamos entrando en una nueva consciencia. Necesitamos reconectar con nuestro ser más intuitivo, etc.” Si, así fue que logré estar calmada el primer mes de todo esto, me dá mucha pena confesarlo, pero es así.

A finales de enero estaba sentada en el aeropuerto de Medellín esperando el vuelo a Bogotá. Habíamos ido por 5 días a Colombia a la Feria ColombiaTex. El día después de la feria me halé la espalda. Estaba ahí en sentada en el aeropuerto con mucho dolor, viendo el televisor mientras llegaba el vuelo. Pasaban las noticias. En EEUU arrancaba el juicio político contra Donald Trump, Australia estaba en llamas y luego una pequeña noticia al final: en una ciudad de China, Wuhan, había un brote de una gripe que parecía ser muy peligrosa. Con ese dolor de espalda que tenía, al ver esa última noticia me recuerdo haberme dicho, ay sólo eso me falta, un virus maléfico.

Un mes después, Costa Rica estaba totalmente cerrada y yo estaba muy agradecida con la vida de que mi hijo Dante se hubiese devuelto a tiempo de Buenos Aires, pues hacía ni quince días que andaba visitando a sus abuelos. Por lo menos, estábamos todos juntos.

Creo que todos tenemos nuestra historia lo que nos pasó. Marzo para nuestra empresa, era el comienzo de la época turística, nos habíamos stockeado muy bien porque iba a ser una de las mejores temporadas de la vida según los pronósticos. Teníamos muchos planes, al igual que ustedes, muchas cosas que lustrar sobre viajes y playas y montañas y…

Abril, imposible pensar en dibujar. Cualquiera de las cosas que tenía planeadas, en ese momento me parecía sin sentido. Estaba todo el tiempo reunida con nuestro equipo, inmersos en una incertidumbre y tratando de estar positiva. Ninguno sabia nada, nadie sabia nada, y aún tampoco.

Cuando nada es seguro, cuando nos sentimos perdidos, algunas personas que son religiosas sienten confort en rezar, otras en meditar, otras personas muy inteligentes se vuelcan a la ciencia y bueno, yo disculpen, en la Astrología. Claro me dije, pasamos a la era de Acuario , estos son los cambios que decían los astrólogos. Es lo que tiene que pasar, estamos entrando en una nueva consciencia. Necesitamos reconectar con nuestro ser más intuitivo y por eso tenemos que estar encerrados el Universo es inteligente, etc. Si, así fue que logré estar calmada este primer mes de todo esto, me dá mucha pena confesarlo pero es así.

Soy Sagitariana, siempre me ha encantado identificarme con mi signo; pero supongo que a todos nos pasa igual. Debe ser muy duro no estar contenta con el signo de uno. Tampoco sé tanto de atrología, pero si me gusta mucho hablar con mi amiga Mafer que es experta en cartas astrales, años lunares y Venus y Mercurios retrógrados.

Entonces, en vez de dibujar todo lo que tenía planeado, un día quise dibujar Sagitario, y siguió Leo y luego Cancer y así, me salió todo el horóscopo. Algo no muy Holalola, pero mejor que sumirme en la desesperación. Sagitario es un signo muy positivo y siempre encontramos una luz en la oscuridad. Además de oportunidades para aprender. Así que mi iPad estuvo echando humo toda una semana, empecé a postear uno a uno cada signo, al segundo día ya sentía la presión, pues me preguntaban y cuando Géminis y cuando Aries y Escorpión?.

Uso un programa que se llama Fresco de Adobe. Mucha gente usa Procreate en su iPad, pero Fresco me gusta pues tiene unos pinceles que se llaman Pinceles vivos. Y cuando pintás, la mancha se hace igual que si tuviera un pincel con agua y tinta en la mano, es maravilloso . Trato de buscar un balance entre el iPad y pintar en real, pero la verdad que es increíble lo que se puede hacer con la tecnología.

Así que bueno, no sé si Mercurio está retrógrado o vamos por el inicio de Acuario, pero pasa que si, que todo cambió, y reinventarnos es lo mejor que todos podemos hacer. Les mando un abrazo y que sus signos les acompañen.

Y a vos cómo te ha ido? Qué signo sos?

Abrazo,

Priscilla